NOSECUANTOS TORNEO DE VERANO ESCRABELICO

CRAPULEANDO

Recuerdo una prolija noche en Fuengirola  después de un torneo, durante la pantagruélica cena todos trasegábamos tintorro a espuertas, de repente Isabel Pérez, palmariamente ahíta de morapio, se incorporo de su  asiento y sentenció: “En el comer y el follar, todo es empezar”

Sabias palabras sin duda, lástima que no incluyera también el escribir, yo ya he empezado varias veces esta crónica y no sé muy bien como continuar, sin duda podría salmodiar de forma soporífera lo acaecido durante el torneo y después dedicarme a lo que más me gusta: refocilarme sin pudor alguno en el légamo ponzoñoso de mi intrínseca pereza, pero sé muy bien que eso no es lo que esperáis, mi  legión de queridos y sufridos lectores, de este humilde orebce del lenguaje, se que queréis que exprima y alambique cada nimia situación hasta extraerle el elixir mágico que provoca la risa, que libe con fruición cada anécdota inane para transformarla después en la jalea que endulce vuestros labios, que desnude de un borrón a la harapienta cotidianidad y la vista de gala con el vacuo oropel de mis brillantes vocablos…pero como veis de mi exhausta pluma solo surgen ya las últimas palabras de un poeta exánime.

Lo siento.

En los días previos al torneo las cosas no  pintaban demasiado bien, con cinco inscritos y una decena de indecisos todo apuntaba hacia la conveniencia de una heroica huida a tiempo, hasta la mismísima presidenta del club había abandonado el barco, por suerte los indecisos fueron decidiéndose al fin y uno tras otro anunciaban entusiasmados su inasistencia al torneo, la debacle ya era inevitable. Solo un milagro laico podía evitar la hecatombe y este se materializo en forma de advenimiento místico, Enric Hernández anunciaba su inminente venida, acontecimiento que sumado a la asistencia de Patxi Navarro, Montse Sánchez, Vanessa Amorós, J.J. Novoa, Ernesto Senestrari, Pablo Pérez, José Vicente Gil, Graciela Dalmas y yo mismo, completaba una decena de jugadores con un nivel altísimo y además nos ofrecía la posibilidad de plantear un torneo con formato de todos contra todos.

Después de esto, no tuve más remedio que expoliar todos los ahorros que quedaban en las esquilmadas arcas del club e irme a un chino a comprar unos magníficos regalos para los premios, acordes con la magnitud del evento que se avecinaba.

Patxi viajaba el Viernes por la mañana hacia Murcia, lo hacía, tan feliz como un niño con un coche nuevo, estrenaba además un Global Position System de ultimísima generación, a las once lo llame a su móvil para ver si llegaba a tiempo de comer unos exquisitos canelones y me confirmo alborozado que acababa de pasar por Valdepeñas y el GPS indicaba que en un par de horas llegaría a Lyon, asi que dijo que lo esperáramos. Yo estaba estupefacto lo reconozco y más aun cuando efectivamente lo vi aparecer,  finalmente y después de haber ingerido su decimo cuarto canelón, me confesó como había conseguido tamaña hazaña: arrancando de cuajo el GPS del salpicadero y abriendo un centímetro la ventanilla del conductor llego hasta allí guiándose por el olor de la bechamel gratinada.

Mientras tanto, los demás jugadores iban llegando paulatinamente al Entresierras, el Viernes por la noche la mayoría y el sábado temprano el resto. Por primera vez en mi vida empezaba un torneo totalmente relajado y sin temor a lo que el maldito swuis perfect pudiese depararme.

En primera ronda jugué con Vanessa Amorós y llegamos a un final sin opciones para mí, pero un error suyo me permitió llevarme la partida en el descuento por tres puntos.

En ronda 2 tuve una partida muy tranquila con José Vicente Gil, 510-395, no tuvo ninguna opción.

Y en ronda 3 una partida muy estratégica con Pablo Pérez, especule hasta el final para que se comiese la Q y cuando cogí la ultima letra y vi una A me las prometí muy felices, hasta que me COSQUE de que la Q estaba jugada desde el tercer turno. Patético.

Pese a que el cielo amenazaba tormenta, los más intrépidos nos arriesgamos a darnos un baño en la piscina antes de comer, teníais que haber visto a Graciela (1,50 m) intentando hacerle una ahogadilla a Enric (2,05 m.)Mientras tanto Vane, Mari y Montse se bebían varias botellas de albariño tumbadas en sendas hamacas.

La comida como siempre fue excelente, sobre todo las carrilleras causaron sensación y después de la pitanza viene la holganza, mi inteligente cronograma nos permitía disponer de más de dos horas para echar una siesta y darse un baño, por supuesto que nos fuimos a la sala a jugar Scrabble.

En la primera ronda de la tarde, Patxi Navarro me RAQUEO, me ADARDEO y me CACHAÑEO sin piedad, eso sí, me di el gustazo de jugarle un OREBCE que al final lucho por ser la mejor palabra del torneo en dura pugna con un YOLILLA de Vanessa.

En ronda 5 jugué mi mejor partida del torneo, enfrente Ernesto Senestrari, partida igualada en la que conseguí abrirme una línea de triple imposible de tapar para asegurarme el poder colocar un Scrabble final. Preciosa partida.

Y en ronda 6, mi partida más esperada, solo había jugado una vez en mi vida con Enric Hernández y esto fue cuando yo era aun un jugador bisoño…en esta ocasión presente algo más de batalla, pero Enric en este torneo era una apisonadora con casi todas las partidas por encima de 500, me gano con facilidad, al menos logre, aprovechando un ARAÑANDO suyo de 100 puntos, jugar un bonito ENMARAÑANDO.

La cena también fue magnífica y como colofón salimos a la terraza del hotel a tomarnos unas copas y a conversar de temas metafísicos. El bar cerraba a las doce asi que nos vituallamos con reservas alcohólicas suficientes para una boda, por desgracia no les quedaba tequila, pero el camarero muy amable me dio una botella enterita de un producto que me juro que dejaba limpísimo y brillante el suelo del bar, creo que ni se dieron cuenta, con un poco de sal y limón se la bebieron toda. No es de extrañar por tanto que la noche que comenzó con una sesuda conversación sobre obras maestras del cine ( Dos tontos muy tontos, Resacon en Las Vegas 3, Yo, yo mismo e Irene…..en fin ya sabeis, cine de arte y ensayo) deviniera en una trascendente charla sobre la experiencia mística que se vive en el momento de sentarse en un inodoro publico con la tapa subida y totalmente empapado mientras rogamos a Dios que sea tan solo agua, para concluir con una didáctica lección de bricolaje sobre como decorar los azulejos de un cuarto de baño con poco esfuerzo y dinero…creo que ya nunca volveré a ser el mismo.

A la mañana siguiente, milagrosamente, todos estaban en perfecto estado de revista, al parecer el brebaje que nos bebimos la noche anterior no había podido perforar del todo nuestras, curtidas  en mil batallas, paredes estomacales, asi que todo quedo saldado con unas cuantas ulceras.

En ronda 7 gane a Graciela sin oposición 451-285, la mañana del domingo empezaba tranquila.

La ronda 8 se presentaba más complicada, me toco jugar con Montse Sánchez, pero la bolsa me trato bien y con cuatro Scrabbles míos casi consecutivos  y sus malos atriles no tuvo ninguna opción.

Y en la última ronda J.J. Novoa, aun me quedaba una remota posibilidad de meterme en el tercer escalón del pódium, pero me gano con autoridad y aseguro su segunda plaza enviándome a mí a la cuarta posición.

Al final ganador indiscutible e incontestable, Enric Hernández, segunda posición para J.J. Novoa que siempre hace pódium cuando viene a Murcia y tercero Pablo Pérez con una muy meritoria actuación.

En cuanto a la mejor palabra no hubo una decisión clara al respecto, había muchas y todas buenísimas, al final la cosa se redujo a: OREBCE o YOLILLA. Ciertamente si yo no hubiese puesto una de ellas y me dan a elegir reconozco que tendría serios problemas para ello pero quizás me hubiese decantado por la segunda, Vanessa Amorós (perpetradora del YOLILLA) demostró ser un perfecto caballero y manifestó que le gustaba más el OREBCE…creo sinceramente que las dos merecen ser declaradas ganadoras “ex aequo”

La entrega de premios y la posterior sesión fotográfica tuvieron lugar en la piscina y fue sin duda una de las cosas más divertidas que recuerdo, sobre todo el salto en bomba de Ernesto justo cuando hacían la foto del pódium, esto provoco que Novoa pronunciara por enésima vez lo que sin duda se ha convertido ya en la frase del torneo: “en todas las piscinas siempre tiene que haber un argentino boludo”. Por cierto que todos los premiados se fueron muy satisfechos con sus premios, Enric dijo que su hijo iba a ponerse muy contento con su flotador-jirafa, Pablo hizo entrega de sus magníficos manguitos de los pitufos a su hijo Pablito y Novoa con su espectacular piscina de veinte centímetros de profundidad y ochenta de diámetro dudaba entre montar un chill out en la terraza de su edificio o prepararse para el próximo mundial de salto de trampolín en el salón de su piso, sinceramente yo le aconsejo la primera opción.

Por ponerle un defecto al torneo, decir que la paella que nos comimos el domingo no es la mejor que he probado, esta afirmación viniendo de un superviviente de dos paellas valencianas no es nada baladí, esta parecía más bien una masa informe y había serios problemas para poder desincrustar las gambas, pero en fin, nada es perfecto.

Durante la sobremesa el albariño hizo su efecto y acordamos por unanimidad suprimir del juego los comodines, las conjugaciones verbales, los plurales, asi como también reducir el valor de algunas letras (la Z y la J deberían valer solo 4 puntos) y se pospuso hasta la próxima borrachera la discusión sobre la conveniencia de eliminar los dígrafos y mandar la maldita Q al carajo.

No pretendo ser pretencioso, pero arriesgándome a parecer un presunto presuntuoso afirmo que este torneo ha sido expectacular (ya sé que no es con X) y posiblemente insuperable, pero tratándose de Escrabelico nunca se puede estar seguro, asi que os aconsejo que no os perdáis nuestro próximo torneo porque os aseguro que no os arrepentiréis.

Mi más sincera enhorabuena a los ganadores y mi eterno agradecimiento a todos los asistentes, espero que no os hayamos defraudado, al menos en lo que a organización del torneo se refiere, en cuanto a la crónica estoy seguro de os defraudará ampliamente superando cualquier expectativa.

Normalmente mis crónicas son irónicas, divertidas, sarcásticas, mordaces, caústicas, satíricas, caricaturescas, malas, sobre todo esto último, pero ya sabeis lo que dicen, hay que renovarse o morir, el ingenio debe estar en continua evolución o al final hasta la genialidad aburre, yo debo ser un autentico genio, porque aburro desde el principio, aun así, me encantaría evolucionar, mejorar mi estilo, pulir mi sintaxis, adjetivar con tino, acertar con alguna coma, no cometer faltas de ortografía…pero mi talento más que limitado es inexistente, asi que lo que hago día a día es involucionar y ante la imposibilidad de renovarme creo que al final no me quedara más remedio que morir…como escritor me refiero.

Asi, que quizás sea cierto que estas son las últimas palabras de un poeta exánime.

Puede que estos sean los últimos renglones torcidos de un escritor fallido o los últimos versos plagiados que te escribo o la última palabra, cuando ya no quedan palabras o la última voluntad de un escritor yermo sembrada en el paramo de una hoja en blanco o el ultimo hálito de un verso no escrito o quizás tan solo, otra crónica.

                                       ELCRAPULA